Archive for marzo 2013
EL Oso
Esta historia
habla de un sastre, un zar y su oso.
Un día el zar
descubrió que uno de los botones de su chaqueta preferida se había caído.
El zar era
caprichoso, autoritario y cruel (cruel como todos los que enmarañan por
demasiado tiempo en el poder), así que, furioso por la ausencia del botón mandó
a buscar a su sastre y ordenó que a la mañana siguiente fuera decapitado por el
hacha del verdugo.
Nadie contradecía
al emperador de todas la Rusias, así que la guardia fue hasta la casa del
sastre y arrancándolo de entre los brazos de su familia lo llevó a la mazmorra
del palacio para esperar allí su muerte.
Cuando, cayo el
sol un carcelero le llevó al sastre la última cena, el sastre revolvió el plato
de comida con la cuchara y mirando al carcelero
dijo – Pobre del zar.
- El carcelero
no puedo evitar reírse - ¿Pobre del zar?, dijo pobre de ti tu cabeza quedará
separada de tu cuerpo unos cuantos metros
mañana a la mañana.
- Si, lo sé pero mañana en la mañana el zar perderá
mucho más que un sastre, el zar perderá
la posibilidad de que su oso la cosa que más quiere en el mundo su propio oso
aprenda a hablar.
- ¿Tú sabes
enseñarle a hablar a los osos?, preguntó el carcelero sorprendido.
- Un viejo
secreto familiar... – dijo el sastre.
Deseoso de
ganarse los favores del zar, el pobre guardia corrió a contarle al soberano su
descubrimiento:
¡¡El sastre sabía
enseñarle a hablar a los osos!!
El zar se sintió
encantado. Mandó rápidamente a buscar al sastre y le ordenó:
-¡¡Enséñale a
mi oso a hablar nuestro gustaría complaceros pero la verdad, es que enseñar a
hablar a un oso es una ardua tarea y lleva tiempo... y lamentablemente, tiempo
es lo que menos tengo...
-El zar hizo un
silencio, y preguntó ¿cuánto tiempo llevaría el aprendizaje?
- Bueno,
depende de la inteligencia del oso... Dijo el sastre.
- ¡¡El oso es
muy inteligente!! – interrumpió el zar
– De hecho es
el oso más inteligente de todos los osos de Rusia.
-Bueno, musitó
el sastre... si el oso es inteligente... y siente deseos de aprender... yo
creo... que el aprendizaje duraría... duraría... no menos de...... DOS AÑOS.
El zar pensó un
momento y luego ordenó:
- Bien, tu pena
será suspendida por dos años, mientras tanto
tú entrenarás al oso. ¡Mañana empezarás!
- Alteza - dijo el sastre – Si tu mandas al verdugo a
ocuparse de mi cabeza, mañana estaré muerto, y mi familia, se las ingeniará
para poder sobrevivir. Pero si me conmutas la pena, yo tendré que dedicarle el
tiempo a trabajar, no podré dedicarme a tu oso... debo mantener a mi familia.
- Eso no es
problema – dijo el zar – A partir de hoy y durante dos años tú y tu familia
estarán bajo la protección real. Serán vestidos, alimentados y educados con el
dinero de la corte y nada que necesiten o deseen, les será negado... Pero, eso
sí... Si dentro de dos años el oso no habla... te arrepentirás de haber pensado
en esta propuesta... Rogarás haber sido muerto por el verdugo... ¿Entiendes,
verdad?
- Sí, alteza.
- Bien... ¡¡Guardias!! - gritó el zar –Que lleven al sastre a su
casa en el carruaje de la corte, denle dos bolsas de oro, comida y regalos para
sus niños. Ya... ¡¡Fuera!!
El sastre en
reverencia y caminando hacia atrás, comenzó a retirarse mientras musitaba
agradecimientos.
- No
olvides - le dijo el zar apuntándolo con el dedo a la
frente – Si en dos años el oso no habla...
– Alteza... -
...Cuando todos
en la casa del sastre lloraban por la pérdida del padre de familia, el hombre
pequeño apareció en la casa en el carruaje del zar, sonriente, eufórico y con
regalos para todos.
La esposa del
sastre no cabía en su asombro. Su marido que pocas horas antes había sido llevado
al cadalso volvía ahora, exitoso, acaudalado y exultante...
Cuando estuvo a
solas el hombre le contó los hechos.
- Estás LOCO –
chilló la mujer – enseñar a hablar al oso del zar. Tú, que ni siquiera has
visto un oso de cerca, ¡Estás, loco!
Enseñar a hablar
al oso... Loco, estás loco...
- Calma mujer,
calma. Mira, me iban a cortar la cabeza mañana al amanecer, ahora... ahora
tengo dos años... En dos años pueden pasar tantas cosas en dos años.
En dos años... –
siguió el sastre - se puede morir el
zar... me puedo morir yo... y lo más importante... por ahí el ¡¡oso habla!!
domingo, 24 de marzo de 2013
Posted by Melchor Espinosa
El Buscador
Este cuento de Bucay que publico hoy, ya lo hemos escuchado y visto muchas veces, pero como con los grandes autores y las grandes historias pasa que a veces, y de forma inesperada encuantras nuevas interpretaciones. El principio del cuento cobra un nuevo sentido y se entiende mejor despues de ver "El guerrero pacífico"
Bueno espero que os guste:
EL BUSCADOR
Esta es la historia de un hombre al que yo definiría como
buscador
Un buscador es
alguien que busca. No necesariamente es alguien que encuentra. Tampoco esa
alguien que sabe lo que está buscando. Es simplemente para quien su vida es una
búsqueda.
Un día un buscador sintió que debía ir hacia la ciudad de
Kammir. Él había aprendido a hacer caso riguroso a esas sensaciones que venían
de un lugar desconocido de sí mismo, así que dejó todo y partió. Después de dos
días de marcha por los polvorientos caminos divisó Kammir, a lo lejos. Un
poco antes de llegar al pueblo, una colina a la derecha del sendero le llamó la
atención.
Estaba tapizada de un verde maravilloso y había un montón de árboles,
pájaros y flores encantadoras. La rodeaba por completo una especie de valla
pequeña de madera lustrada… Una portezuela de bronce lo invitaba a
entrar. De pronto sintió que olvidaba el pueblo y sucumbió ante la tentación de
descansar por un momento en ese lugar. El buscador traspaso el portal y
empezó a caminar lentamente entre las piedras blancas que estaban distribuidas
como al azar, entre los árboles.
Dejó que sus ojos eran los de un
buscador, quizá por eso descubrió, sobre una de las piedras, aquella inscripción
… “Abedul Tare, vivió 8 años, 6 meses, 2 semanas y 3 días”. Se sobrecogió un
poco al darse cuenta de que esa piedra no era simplemente una piedra. Era una lápida,
sintió pena al pensar que un niño de tan corta edad estaba enterrado en ese
lugar… Mirando a su alrededor, el hombre se dio cuenta de que la piedra de al
lado, también tenía una inscripción, se acercó a leerla decía “Llamar
Kalib, vivió 5 años, 8 meses y 3 semanas”. El buscador se sintió terrible mente
conmocionado. Este hermoso lugar, era un cementerio y cada piedra una lápida.
Todas tenían inscripciones similares: un nombre y el tiempo de vida exacto del
muerto, pero lo que lo contactó con el espanto, fue comprobar que, el que más
tiempo había vivido, apenas sobrepasaba 11 años. Embargado por un dolor
terrible, se sentó y se puso a llorar. El cuidador del cementerio pasaba por ahí
y se acercó, lo miró llorar por un rato en silencio y luego le preguntó si
lloraba por algún familiar.
- No ningún familiar – dijo el buscador - ¿Qué pasa
con este pueblo?, ¿Qué cosa tan terrible hay en esta ciudad? ¿Por qué tantos niños
muertos enterrados en este lugar? ¿Cuál es la horrible maldición que pesa sobre
esta gente, que lo ha obligado a construir un cementerio de chicos?.
El anciano sonrió y dijo: -Puede usted serenarse, no hay tal
maldición, lo que pasa es que aquí tenemos una vieja costumbre.
Le contaré:
cuando un joven cumple 15 años, sus padres le regalan una libreta, como esta
que tengo aquí, colgando del cuello, y es tradición entre nosotros que, a
partir de allí, cada vez que uno disfruta intensamente de algo, abre la libreta
y anota en ella: a la izquierda que fu lo disfrutado…, a la derecha, cuanto tiempo
duró ese gozo. ¿ Conoció a su novia y se enamoró de ella? ¿Cuánto tiempo duró
esa pasión enorme y el placer de conocerla?…¿Una semana?, dos?, ¿tres
semanas y media?… Y después… la emoción del primer beso, ¿cuánto duró?, ¿El
minuto y medio del beso?, ¿Dos días?, ¿Una semana? … ¿y el embarazo o el
nacimiento del primer hijo? …, ¿y el casamiento de los amigos…?, ¿y el viaje más
deseado…?, ¿y el encuentro con el hermano que vuelve de un país lejano…?¿Cuánto
duró el disfrutar de estas situaciones?… ¿horas?, ¿días?…
Así vamos anotando en
la libreta cada momento, cuando alguien se muere, es nuestra costumbre abrir su
libreta y sumar el tiempo de lo disfrutado, para escribirlo sobre su tumba.
Porque ese es, para nosotros, el único y verdadero tiempo vivido.
viernes, 22 de marzo de 2013
Posted by Melchor Espinosa
Animarse a volar
ANIMARSE A VOLAR
..Y cuando se hizo
grande, su padre le dijo:
-Hijo mío, no
todos nacen con alas. Y si bien es cierto que no tienes obligación de volar,
opino que sería penoso que te limitaras a caminar teniendo las alas que el buen
Dios te ha dado.
-Pero yo no sé
volar – contestó el hijo.
-Ven – dijo el padre.
Lo tomó de la mano
y caminando lo llevó al borde del abismo en la montaña.
-Ves hijo, este es el vacío. Cuando quieras podrás
volar. Sólo debes pararte aquí, respirar profundo, y saltar al abismo. Una vez
en el aire extenderás las alas y volarás...
El hijo dudó.
-¿Y si me caigo?
-Aunque te caigas
no morirás, sólo algunos machucones que harán más fuerte para el siguiente
intento –contestó el padre.
El hijo volvió al
pueblo, a sus amigos, a sus pares, a sus compañeros con los que había caminado
toda su vida.
Los más pequeños
de mente dijeron:
-¿Estás loco?
-¿Para qué?
-Tu padre está
delirando...
-¿Qué vas a buscar
volando?
-¿Por qué no te
dejas de pavadas?
-Y además, ¿quién
necesita?
Los más lúcidos
también sentían miedo:
-¿Será cierto?
-¿No será
peligroso?
-¿Por qué no
empiezas despacio?
-En todo casa,
prueba tirarte desde una escalera.
-...O desde la
copa de un árbol, pero... ¿desde la cima?
El joven escuchó
el consejo de quienes lo querían.
Subió a la copa de
un árbol y con coraje saltó...
Desplegó sus alas.
Las agitó en el
aire con todas sus fuerzas... pero igual... se precipitó a tierra...
Con un gran chichón
en la frente se cruzó con su padre:
-¡Me mentiste! No
puedo volar. Probé, y ¡mira el golpe que me di!. No soy como tú. Mis alas son
de adorno... – lloriqueó.
-Hijo mío – dijo
el padre – Para volar hay que crear el espacio de aire libre necesario para que
las alas se desplieguen.
Es como tirarse en
un paracaídas... necesitas cierta altura antes de saltar.
Para aprender a volar
siempre hay que empezar corriendo un riesgo.
Si uno quiere
correr riesgos, lo mejor será resignarse y seguir caminando como siempre.
jueves, 21 de marzo de 2013
Posted by Melchor Espinosa
El elefante encadenado
Ocurre que aveces lees un libro y largo tiempo despues cae de la estantería y acaba en tu regazo, no sabes muy bien que hace ahí, porque ha caido o que le ha llevado en ese mismo momento a decidir fijarse en tí, lo abres y empiezas a recordar tantas cosas, este es uno de esos libros, voy a ir publicando algunos de sus muchos cuentos y si encuentro el víedo en youtube lo publicaré también...
EL ELEFANTE ENCADENADO
Cuando yo era chico me encantaban los circos, y lo que más
me gustaba de los circos eran los animales. También a mí como a otros, después
me enteré, me llamaba la atención el elefante. Durante la función, la enrome
bestia hacia despliegue de su tamaño, peso y fuerza descomunal... pero después
de su actuación y hasta un rato antes de volver al escenario, el elefante
quedaba sujeto solamente por una cadena que aprisionaba una de sus patas
clavada a una pequeña estaca clavada en el suelo. Sin embargo, la estaca era
solo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en la
tierra. Y aunque la cadena era gruesa y poderosa me parecía obvio que ese
animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su propia fuerza, podría, con
facilidad, arrancar la estaca y huir. El misterio es evidente: ¿Qué lo mantiene entonces? ¿Por qué
no huye? Cuando tenía 5 o 6 años yo todavía en la sabiduría de los grandes.
Pregunté entonces a algún maestro, a algún padre, o a algún tío por el misterio
del elefante. Alguno de ellos me explicó que el elefante no se escapaba porque
estaba amaestrado. Hice entonces la pregunta obvia: -Si está amaestrado, ¿por qué lo encadenan? No recuerdo haber recibido ninguna
respuesta coherente. Con el tiempo me olvide del misterio del elefante y la
estaca... y sólo lo recordaba cuando me encontraba con otros que también se habían
hecho la misma pregunta. Hace algunos años descubrí que por suerte para mí
alguien había sido lo bastante sabio como para encontrar la respuesta: El
elefante del circo no se escapa porque ha estado atado a una estaca parecida
desde muy, muy pequeño. Cerré los ojos y me imaginé al pequeño recién nacido
sujeto a la estaca. Estoy seguro de que en aquel momento el elefantito empujó,
tiró, sudó, tratando de soltarse. Y a pesar de todo su esfuerzo, no pudo. La
estaca era ciertamente muy fuerte para él. Juraría que se durmió agotado, y que
al día siguiente volvió a probar, y también al otro y al que le seguía... Hasta
que un día, un terrible día para su historia, el animal aceptó su impotencia y
se resignó a su destino. Este elefante enorme y poderoso, que vemos en el
circo, no se escapa porque cree -pobre- que NO PUEDE. Él tiene registro y
recuerdo de su impotencia, de aquella impotencia que sintió poco después de
nacer. Y lo peor es que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese
registro. Jamás... jamás... intentó poner a prueba su fuerza otra vez...
miércoles, 20 de marzo de 2013
Posted by Melchor Espinosa
Encuesta Plataforma UCV
Ya están los resultados de la encuesta realizada en el mes de enero sobre la opinión de los usuarios de la plataforma de la UCV.
No es que arroje ningun dato sorprendente y en el artículo de UCVnet tampoco ofrecen respuesta a uno de los aspectos más comentados como es el "dichoso" botoncito de últimos eventos.
Fecha: 29 Enero de 2013
No es que arroje ningun dato sorprendente y en el artículo de UCVnet tampoco ofrecen respuesta a uno de los aspectos más comentados como es el "dichoso" botoncito de últimos eventos.
Fecha: 29 Enero de 2013
Encuesta de Opinión sobre la Plataforma docente
UCVnet 2012-2013
En la primera encuesta de opinión para detectar la satisfacción y opinión de los usuarios de la plataforma docente, realizada en enero de 2013, se ha recogido una participación de 713 estudiantes y 164 docentes, todos ellos pertenecientes a la UCV.
La Unidad de Nuevas Tecnologías de la UCV (SENT) analizará las propuestas de los usuarios para establecer mejoras en la herramienta para el próximo curso. A continuación os exponemos de forma breve algunas de los resultados destacados de la encuesta:
Nuestros estudiantes y docentes expresan la importancia que tiene la plataforma para la docencia universitaria: para descargar archivos, videos o presentaciones; para la entrega y corrección de tareas; para la realización de actividades grupales y de debate y para la realización de test y exámenes a través de la misma.
El uso de la plataforma es bastante intensivo en general (aproximadamente unas 5 horas semanales de media por asignatura) y como aspectos a mejorar más demandados son la necesidad de mejorar la visibilidad de los últimos eventos realizados por los docentes en el curso (destacar los archivos nuevos, actividades, etc).
Los estudiantes también demandan una mayor rapidez a sus docentes a la hora de contestar a las tutorías virtuales y una mayor presencia de video-lecciones en los cursos
En la primera encuesta de opinión para detectar la satisfacción y opinión de los usuarios de la plataforma docente, realizada en enero de 2013, se ha recogido una participación de 713 estudiantes y 164 docentes, todos ellos pertenecientes a la UCV.
La Unidad de Nuevas Tecnologías de la UCV (SENT) analizará las propuestas de los usuarios para establecer mejoras en la herramienta para el próximo curso. A continuación os exponemos de forma breve algunas de los resultados destacados de la encuesta:
Nuestros estudiantes y docentes expresan la importancia que tiene la plataforma para la docencia universitaria: para descargar archivos, videos o presentaciones; para la entrega y corrección de tareas; para la realización de actividades grupales y de debate y para la realización de test y exámenes a través de la misma.
El uso de la plataforma es bastante intensivo en general (aproximadamente unas 5 horas semanales de media por asignatura) y como aspectos a mejorar más demandados son la necesidad de mejorar la visibilidad de los últimos eventos realizados por los docentes en el curso (destacar los archivos nuevos, actividades, etc).
Los estudiantes también demandan una mayor rapidez a sus docentes a la hora de contestar a las tutorías virtuales y una mayor presencia de video-lecciones en los cursos