miércoles, 22 de mayo de 2013
Pongamos
en contexto, hay un señor, considerado uno de los mayores lingüistas del siglo
XX, Noam Chomsky que defiende la teoría de una gramática universal, algo
innato, genético y que todos los seres humanos compartimos; la lingüística
sería la ciencia, por tanto, que estudia esta gramática universal, dentro de
esta ciencia encontraríamos la gramática como la disciplina que estudia todas
las reglas y principios que regulan el uso de las lenguas, y esta, tiene varias
divisiones como la fonología, morfología, semántica, lexicología,
pragmática,... Cada una de ellas tiene un objeto de estudio concreto, muchas
veces no diferenciable o imbricados con el resto. Cada una de estos subcampos
trata de explicar el comportamiento de cada uno de sus objetos, así la
fonología se ocupa de los sonidos, y trata de explicar su funcionamiento. Ahora
que hemos concretado bastante, detengámonos un instante aquí, para que la
fonología pueda funcionar necesita una unidad de medida, los fonemas ¿Por qué
estudiaría Físicas? Tema número 1 de todos los manuales de física del mundo,
teoría de errores, la física, como
ciencia que estudia lo ejemplos del mundo físico en general tiene
unidades de medidas, y también un amplio estudio sobre los errores derivados de
las incertezas a la hora de medir, alguno fijos como los de exactitud o de apreciación
del aparato de medida y otros como los espurios, siempre presentes.
Extrapolando resulta que una unidad de medida es un constructo humano para
interpretar una realidad y que a la hora de medir siempre hay un error. Cojamos
un sonido perteneciente a uno de tantos fonemas, bien pues, yo mismo tengo una
pronunciación característica y propia de ese sonido y que difiere de la del
resto de los mortales, por el simple hecho de que somos muy parecidos, pero no
idénticos e incluso difiere del momento o situación en que sea producido ¿Cómo
es posible que se me entienda? Resulta paradójico, pero es el mismo error el
que define la medida, así como el rozamiento define el movimiento, la variación
del error interviene en nuestra cabeza para a pesar del error captar ese
sonido, que difiere tanto o mucho del nuestro y lo identifica como tal. Es
decir nos entendemos. Todo esto demuestra que Chomsky funciona, pero no demos
saltos de júbilo todavía, funcionar no es lo mismo que estar demostrado. Puede
que sólo se quedara con la punta del iceberg, como tantos otros científicos
antes que él. Por poner un ejemplo Hawking (1993) vaticinó que los viajes al pasado en el tiempo
son imposibles ya que todavía no hemos recibido un visitante del futuro, no se
pronunció sobre viajar al futuro, pero para qué, sí luego no puedes volver. Su
lógica es aplastante, y funciona, pero todos vemos que hay mucho más de lo que
se explica. La física nos ha demostrado una cosa y es que no sabemos tanto como
creemos saber, y que lo que a primera vista funciona no tiene por qué ser
cierto, tal vez y si la teoría de cuerdas y los micropolos magnéticos llegan a
ser lo que se espera, la física vuelva a situarse en los altares que hace
algunos años ocupaba, de momento no es así. Pero aun así Chomsky funciona y no
sólo eso, gracias a él atisbamos un gran mundo, pero hay aun mucho por
descubrir.
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